sábado, 4 de noviembre de 2017

LO BONITO QUE SERÍA EL MUNDO SI...

todos fuéramos de la mano.

Y sí, es cierto que es imposible que todos pensemos igual, que no es factible que medio mundo sienta, piense y actúe como el otro medio, pero también es cierto, que si esa mitad no se dedicara a apuñalar a la otra, la vida sería otro cantar.
Otro cantar donde las melodías sonaran más acordes, donde no desentonara la música de las personas que luchan y ocupan cada minuto de su tiempo libre (y a veces, incluso del ocupado), en dar #VISIBILIDADEII

Pero eso, ¿son sueños que jamás podrán verse cumplidos?. ¿O algún día sí?
Ojalá. Yo por lo menos, no dejaré de soñar que así sea.

Me encantaría seguir por estos lares el día que X, Y, H, C u O, trabajaran juntos de verdad.
Que lo dieran todo como lo dan ahora sin mayor pretensión que ayudar, que tender la mano, que dejársela coger cuando llega alguien que de verdad la necesita...
y que no siguiera todo así, como día tras día ves que es y si no lo ves, porque no quieres mirar, vienen y te lo cuentan. Que no hace falta querer hacerlo de la misma manera, jolín... que sólo hay que llegar a un acuerdo de cómo hacerlo entre todos mejor.

Dos personas pueden detener al atracador si éste va solo...
pero puede que si una de las dos mira para otro lado, el malo gane.
Y nunca se le debe dejar ganar al malo, nunca se debe mirar para otro lado.

Hay mucha gente que trabaja sin pedir nada a cambio. Gente que aunque sea así, sin querer ningún mérito en su trabajo, agradece que en algún momento le digan un, "chapó", porque ese reconocimiento de saber que uno hace las cosas bien, ayuda a seguir.
También hay mucha gente que a pesar de no recibir un "olé" sino más bien al revés y viendo que haga lo que haga, y de la manera que lo haga, consiga lo que consiga, y ayude con eso a 2 o a 1000, siempre será criticada, pisoteada, ignorada... pero eso es otro cantar, porque de envidia está el mundo lleno.  Y además, les afecta sólo un ratito, porque luego siguen, y siguen, y siguen...
Envidias que no tienen sentido, envidias que no llevan a ninguna parte más que a separar el mundo un poco más de lo que ya lo está y flaco favor hacen, a lo que importa de verdad.
Y es triste, de verdad que es muy triste.

Pero cambiará. Estoy segura.
Algún día, esos que hoy se dedican a pasar por encima de los demás, esos que hoy te cogen prestada la mano que le tiendes para darte un estirón y dejarte sin ella a la primera de cambio, abrirán los ojos.
Y los abrirán porque les pasará a ellos. 
En ese momento se darán cuenta de lo equivocados que estaban, y sólo entonces, releerán este post entendiéndolo de verdad... y entonces, lucharán de verdad por que todas esas manos alcen el canto juntos. Esa canción que sólo puede llevarnos a todos juntos donde merecemos llegar.
A soñar de verdad que puede ser realidad.